Ya decían que el año 2020 iba a ser un año lleno de cambios, sobretodo a nivel energético, se podía percibir en el ambiente una pequeña tensión o fuerza pero jamás pudimos hacernos una idea de esta situación que se nos venía encima.

 

Ya decían que el año 2020 iba a ser un año lleno de cambios, sobretodo a nivel energético, se podía percibir en el ambiente una pequeña tensión o fuerza pero jamás pudimos hacernos una idea de esta situación que se nos venía encima.

Ha sido sobretodo un momento de parar y reflexionar, de volvernos a replantear todo desde otro punto y la moda no iba a ser menos ya que

más que nunca, el uso que hacemos de la moda está siendo cuestionado.

 

No es la primera vez que existe una crisis y no se ve reflejado en la moda. Son justamente los momentos de crisis dónde es un momento perfecto para formar una táctica, algunos de los mejores diseños han nacido a raíz de una lucha. Si nos vamos atrás en el tiempo, durante el periódo de la Primera Guerra Mundial, Coco Chanel supo ver la oportunidad en ese periodo y creó piezas de alta costura para mujeres a partir de tejidos y materiales hasta entonces destinados a los mozos de cuadras, asistentas y clases trabajadoras. 

Dió un giro 360 a la forma de vestir de la mujer, para que ellas se vieran más cómodas. Coco supo crear una marca para mujeres vencedoras.

 

Esta situación genera que nosotros como consumidores, empaticemos aún más  con las marcas y sobre todo, las personas tras ellas.

También es una llamada de atención a los diseñadores para replantearnos la forma en la que producción.

 

 

Sara Maino, deputy Editor in Chief of Vogue Italia y directora de Vogue Talents, ha declarado recientemente: “No hemos respetado el planeta hasta ahora y de alguna manera esta es un mensaje y desafortunadamente es un mensaje muy, muy pesado. El cambio tenía que hacerse. Todos pensaron que el cambio sucedería gradualmente, pero ese no es el caso. El cambio tiene que hacerse ahora,  y rápidamente ”(Vogue, 2020). 

La moda no volverá igual, volverá diferente, renovada, como si se tratase de un nuevo resurgir, volverá a una belleza más pura y básica, donde pesará la expresión individual.